La Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO) propone doce pautas para mejorar nuestra salud bucodental:
1 | Mejorar la higiene bucodental. Lo ideal es cepillar los dientes con pasta fluorada durante dos minutos, sin olvidar lengua y paladar, con una buena técnica, al menos después de cada comida, especialmente antes de acostarse. El cepillo debe cambiarse cada 3 meses.
2 | Cuidar la alimentación. Uno de los mejores aliados son las frutas y verduras frescas. Por el contrario, hay que reducir la ingesta de azúcar. Beber suficiente agua (unos dos litros al día) también ayuda a mantener la salud bucodental.
3 | No tomar productos ácidos. Las bebidas y comidas ácidas dañan el esmalte dental. Si se ingieren, es mejor esperar media hora antes de cepillar los dientes.
4 | Cambios de temperatura. Los contrastes bruscos de temperatura en los alimentos o bebidas pueden provocar aumento de la sensibilidad e, incluso, inflamaciones de los vasos sanguíneos del interior de los dientes.
5 | Reducir el alcohol. El alcohol daña la salud bucal, pero es preferible el vino tinto al vino blanco y al cava, más dañinos para el esmalte y el cemento de la raíz dental.
6 | Evitar el café y el té. Estas bebidas oscurecen el esmalte.
7 | No fumar. El tabaco deteriora el tejido que rodea al diente y es un factor de riesgo de las enfermedades periodontales (encías) y ciertos tipos de cáncer.
8 | Proteger los dientes. En caso de practicar deportes de contacto, usar un protector bucal para evitar fracturas dentales.
9 | Revisiones periódicas. Realizar al menos una revisión odontológicas al año y acudir al especialista si se nota algún problema en la boca para poder diagnosticar y tratar a tiempo cualquier patología.
10 | Niños. La primera revisión de ortodoncia debe realizarse a los 6 años, para comprobar que el desarrollo de la boca es correcto.
11 | Dientes alineados. Es importante mantener los dientes bien alineados con una buena oclusión y las encías sanas. Si hay malposición dental, los dientes terminan moviéndose.
12 | No olvidar el retenedor. Si se ha tenido ortodoncia, no olvidar las retenciones, porque los dientes se mueven durante toda la vida.
